Si tuviera que elegir un súper poder sería el de poder parar el tiempo. Porque a veces, por mucho que te organices y madrugues no dan las horas del día… ¡no dan!
Así que, esta receta tan sencilla de pasta de espirulina con pesto es una de mis propuestas para cuando vas a contrarreloj pero quieres comer algo rico y sano.
En esta ocasión me acompaña Daft Punk, Alive 2007.
Preparación | Cocción | Dificultad |
5 min | 15 min | Fácil |
2 personas
INGREDIENTES
- 500 gr de pasta de espirulina (yo la compré en Pepita&Grano pero en el Carrefour o Alcampo también hay este tipo de tallarines)
- 15 gr de almendras con piel
- Salsa pesto, he usado una ya hecha que compré en la feria BioCultura que hubo el pasado fin de semana es de la marca Finca Fuentillezjos y está hecho con queso de oveja ecológico, súper rico.
- Queso parmesano rallado (opcional si eres vegano)
PREPARACIÓN
- Ponemos una olla con agua a hervir hasta el punto de ebullición.
- Añadimos nuestros tallarines y los dejamos ahí durante 12 min.
- Mientras, picamos las almendras y sacamos el pesto del frigorífico para que esté a temperatura ambiente.
- Escurrimos la pasta y la echamos en una sartén con un chorrito de aceite (yo en este caso he usado aceite de coco) y el pesto.
- Damos un par de vueltas a todo para que se integre bien.
- Yo no he usado sal en esta receta, porque el pesto ya tiene.
- Servimos la pasta en un plato.
- Añadimos por encima las almendras y el queso rallado.
¡Se finí! Con este aporte de hidratos ya estamos listos para seguir a tope con el día.