O la amas o la odias pero la crema de cacahuete no suele dejar indiferente a nadie. Yo me aficioné a ella en Holanda. Un café y una tosta de pindakaas con mermelada de frutos rojos eran el desayuno perfecto antes de coger mi preciosa y rosa bicicleta… Cómo echo de menos esa bicicleta, es de los pocos buenos recuerdos que tengo de Holanda. El país es precioso pero mi experiencia allí fue muy dura, de hecho, no he vuelto desde que viví allí en el 2014.
En Madrid lo de montar en bici no me mola tanto pero siempre me quedará la crema de cacahuete, que sigue siendo la protagonista de alguno de mis desayunos cuando llego a casa después de mi clase de spinning.
Es un producto con bastante duración, yo la guardo en frigorífico y se mantiene en perfecto estado durante más de dos semanas.
Hoy suena Breakfast in America de Supertramp.
| Preparación | Cocción | Dificultad |
| 10 min | Fácil |
INGREDIENTES
- 400 gr cacahuetes (yo los compro crudos)
- Una pizca de sal
- 2 cucharadas de azúcar de coco, panela o sirope de ágave crudo (opcional)
PREPARACIÓN
- Tostar los cacahuetes en una sartén hasta que estén dorados o en el horno durante 7 min a 180º.
- Dejar que se enfríen
- Introducir todos los ingredientes en el procesador de alimentos hasta que se hace un pasta.
- Bajar los restos de las paredes del procesador y volver a triturar hasta que quede la textura deseada.
Es una receta súper sencilla y un imprescindible en mi despensa.
¡Hasta la próxima receta!
